Se acaban las vacaciones y la vieja rutina de trabajo y obligaciones ya están aquí fielmente. Las energías que hemos recargado se esfuman rápidamente y pueden dar lugar al temido estrés postvacacional que se traduce en ansiedad, fatiga y falta total de motivación.
¿Qué es el estrés postvacacional?
Se podría definir como un malestar físico y emocional que se genera con la vuelta al trabajo. Pensar de manera negativa en esta situación puede devenir en un sentimiento de incapacidad de volver a la rutina y de adecuarse a lo que viene. Es un trastorno adaptativo que cobra existencia solo si le damos lugar en nuestros pensamientos.
Como hemos comentado en otro post, las imágenes que creamos en nuestra mente son las mismas que crean nuestra realidad, por lo que abordar la vuelta al trabajo con angustia, ansiedad y negatividad solo nos devolverá situaciones llenas de estrés.
Síntomas del estrés postvacacional
- Nerviosismo
- Dolores musculares
- Falta de concentración
- Trastornos de sueño
- Cambios de humor
- Malestar general
¿Quiénes sufren el estrés postvacacional?
Como siempre decimos, depende de la situación personal de cada uno y de las circunstancias que están asociadas a la vuelta al trabajo. Sin embargo, en líneas generales, aquellas personas que no se sienten a gusto en su trabajo son más propensas a transitar este tipo de estrés.
Cuando se hace muy difícil encontrar motivaciones en el ámbito laboral, creo que es muy importante replantearse hacia dónde estamos yendo, con qué perspectivas personales y qué objetivos tenemos a nivel profesional. El estrés postvacacional bien puede ser un llamado a la reflexión, una instancia para preguntarnos qué se esconde en realidad detrás de esta negativa a volver a trabajar.
– Asumes más responsabilidades de las que puedes cumplir
– Sufres envidias por parte de los compañeros
-Te sientes tal vez explotad@ y/o no valorad@
-Tienes malestar por no compaginar con tu vida personal
-La organización de la empresa es deficiente
Gafas PSIO, la mejor manera de prevenir el estrés postvacacional
Existen algunas formas de prevenir este malestar:
- Volver unos días antes de comenzar a trabajar para tener un período de adaptación aceptable y re-acomodar los nuevos horarios.
- Comenzar las actividades laborales haciendo lo que más nos guste, siempre que sea posible, claro está.
- Quitarle importancia alegrándose que este curro pagara las próximas vacaciones
- Reorganizarse con este nuevo comienzo con disciplina planificando algo agradable después de la jornada
- Relajación: es la clave para aquietar la mente y enfocarnos en aquellos aspectos positivos que conlleva la vuelta al trabajo.
- Bastan solo 5 minutos de estimulación o 10 minutos a solas con tus gafas PSIO para lograr resultados inmediatos, pero que perduran en el tiempo. Gracias a su tecnología de frecuencia variables de luces y sonidos, tu mente puede alcanzar su clímax de relajación y preparase con tranquilidad para lo que viene.
- ¿Qué puede aportarte en tu día?
-Aumentar tu capacidad y calidad de trabajo con un break reparador.
-Mejorar la productividad y creatividad con reducción del estrés.
-Favorecer el buen estado de ánimo para evitar conflictos internos y con buena atención al cliente.
-Combatir el cansancio y el sueño cuando no has dormido bien o tienes un bajón en tu día.
-Mantener la concentración con la mente despejada y alerta.
PSIO te invita a ser más positivo
Te propongo enfocarte en los aspectos positivos del trabajo. Haz tu lista y seguro que encuentras algo que hace que valga la pena volver a la rutina.
El caos tampoco se aguanta mucho tiempo, hay que procurar el equilibrio entre la vida personal y profesional. Relativizar o tomar decisiones que si no llegan por ti mismo llegaran a la fuerza de las circunstancias, quizás tomándote poco preparado.
La vuelta es siempre un nuevo comienzo, ¡alégrate!